¡Qué quilombo que fue armar esa red! Parece que todo empezó como una cosa simple: un par de cables y listo. Pero, como suele pasar, se terminó complicando un toque más de lo esperado. Porque claro, vos decís "conectar tres computadoras, fácil", pero después te das cuenta de que, ¡uh!, faltó este cable, ¡ah!, que no tenemos suficientes fichas RJ45, ¡y listo! La anécdota se vuelve una epopeya tecnológica.
Así que acá va la historia, para que no se me olvide nunca más lo que pasó con los 32 metros de cable. La idea era simple: tirábamos ese cable entre las computadoras y conectábamos todo en red. Pero claro, no todo puede ser tan sencillo, ¿no? Al toque nos dimos cuenta de que necesitábamos más metros. ¡Qué sorpresa! A ver, empecemos por las cuentas, que al final fueron un total de 88 metros de cable repartidos así:
- 47 metros que salieron de la combinación de los 32 metros iniciales más unos 15 metros extra que nos dimos cuenta que faltaban (¿cómo nadie se dio cuenta antes? ¡No sé!).
- 38 metros más, que salieron de sumar otros 6 metros a los 32 que ya teníamos.
- Y claro, uno chiquito para el módem/router. Nada del otro mundo, solo 1 metro. Ese no nos dio problemas.
- Pero acá viene el plot twist... ¡Nos olvidamos del tercer cable para la PC principal! ¿Cómo? Ni idea, boludo, ni idea. Así que ahí metimos uno de 2 metros y listo el pollo.
Después de todo eso, cuando hacés la cuenta, te querés matar. ¡88 metros de cable! Parecía un quilombo más largo que la saga de Dragon Ball Z. Pero al final, entre chistes, memes y maldiciones, lo terminamos de armar.
Ahora bien, el módem... ¡ah, el Zyxel Prestige 600! ¡Ese se merece su propio capítulo! Después de configurarlo (y de leer tutoriales, obvio), andaba más o menos. Pero acá viene la parte divertida: en algún punto nos dio por buscar un nuevo router, uno que se la banque mejor. Así que ahí estábamos, mirando en DeRemate y encontramos un Linksys a 70 dólares. ¡El más barato de los Linksys! Y yo confiado, porque ya lo conocía. Pero bueno, si había que ahorrar, había otra opción: uno más barato a 44 dólares (130 pesos ponele). Pero claro, no era Linksys, así que la confianza bajaba un toque. Vos seguro también pensás lo mismo, ¿no?
En fin, a todo eso le sumamos 8 fichas RJ45 que nos salieron unos 2 pesos cada una, y el presupuesto total quedó más o menos en unos $426 (incluyendo la mano de obra). Pero si metíamos el router más barato, nos ahorrábamos unos 80 pesos y el total quedaba en $346. Al final, la decisión era si gastar más por el caño del Linksys o ahorrar y arriesgar un toque con el otro.
Ah, y casi me olvido. Después de todo ese quilombo, tuve que buscarme la configuración del Zyxel para que funcione como necesitábamos. Menos mal que en Helpy.com me encontré un tutorial salvador que me hizo la vida más fácil.
Así que bueno, ahí quedó todo armado. Moraleja: siempre chequeá bien cuántos metros de cable necesitás antes de arrancar. Y si vas a cambiar de router, pensalo dos veces, no sea cosa que te metas en otro quilombo...