Crear contenido de calidad a lo loco y sin morir en el intento es es posible. Así que vamos a meternos de lleno en esto.

La reutilización: la imprenta de contenido.

El reciclaje es la clave para tener contenido disponible siempre que lo necesites. Aprovechando los diferentes formatos que tienen las plataformas existentes podes utilizar un contenido pilar y reutilizarlo en partes como nuevo contenido en otra red social.

El tweet: la semilla de todo

Sí, un simple tweet. Pero de los buenos. Algo que te salga del alma, que te apasione. Y de ahí, ¡tuki! Lo convertís en:

  1. Un post de LinkedIn todo profesional (no te olvides de los hashtags).
  2. Una imagen para Instagram que te quede lindo.
  3. Una historia de Instagram, porque todo el mundo está ahí chusmeando.
  4. Un gráfico con una frase, tipo esas imágenes motivacionales que te manda tu tía por WhatsApp.

Dibuje maestro...

A todos, sepamos o no, nos gusta dibujar o hacer garabatos en un papel. Bueno ya sea en un papel o el lápiz del teléfono o una tableta pro en la maquina, dibujar a mano es un contenido original y podes utilizarlo para muchas cosas, no solo anotaciones sencillas, explicaciones, diagramas, cuentos sencillos, etc. La onda es que con un dibujito de 17 segundos podés hacer 5 piezas de contenido diferentes.

Videos

Mucho del contenido fijo lo podes hacer video, con slides o agregando una voz en off, o filmandote con el contenido de fondo. Hoy tenes todo tipo de apps o funciones que te ayudan con eso. Y podes hacer entregas de contenido muy diferentes aportando cosas nuevas en cada una.

El microcontenido

Como hable al principio, esto es similar pero cuando tenes un gran contenido lo seccionás y haces micro contenidos. Hay gente que no puede o no quiere ver un video de dos horas, pero puede ver videos cortos de un minuto o dos, entonces para ellos es este contenido.

Podcasts: para los que prefieren hablar antes que escribir

Si sos de los que les gusta más hablar que escribir, los podcasts son tu salvación. Agarrá el celu, bajate una app como Anchor y empezá a grabar, o usa la app que ya te viene en el telefono. Lo copado es que después podés:

  1. Hacer un post de blog con la transcripción (sí, hay apps que te transcriben todo, no te hagas drama).
  2. Sacar frases para tweets.
  3. Subirlo a mil plataformas diferentes.

Encuestas: hacé que tu audiencia labure por vos

Las encuestas son como el oro en polvo del contenido. Facebook, Twitter o Instagram Stories y listo. Tu audiencia interactúa y vos conseguís info del mercado. Es como matar dos pájaros de un tiro, pero sin lastimar a ningún pajaro, obvio.

Comunidad al poder: dejá que tu gente hable

Hacé preguntas en LinkedIn, Instagram o Facebook que hagan que tu gente se cope y empiece a contar sus experiencias. Como armar una ronda de mate virtual, pero con contenido.

La calidad importa, no te olvides

Ojo, que por querer hacer mucho no te vayas al carajo con la calidad. El contenido tiene que ser bueno, interesante, que le sirva a tu audiencia. No es cuestión de mandar fruta nomás.

En resumen, parece imposible, pero con práctica y estas técnicas, vas a estar creando contenido como si fueras una maquina.

La clave es ser creativo, probar cosas nuevas y encontrar lo que te funciona. Es como cuando probás recetas nuevas en la cocina, algunas te salen bien y otras son para el tacho de basura.

Empezá con un tweet hoy y antes de que te des cuenta vas tener tanto contenido que no vas a entender porque no lo hiciste antes.